Tratamientos corporales
Aumento mamario. Reducción mamaria. Liposucción y lipoescultura. Cirugía estética del abdomen. Lifting de muslos. Radiofrecuencia.
Radiofrecuencia
Hay muchas ocasiones en las que la solución a un determinado problema estético no la encontramos en la cirugía. Existen multitud de técnicas corporales para eliminar depósitos grasos, tensar la piel, mejorar la flacidez y la celulitis…para casi cualquier cosa podemos encontrar un tratamiento adecuado, que aunque normalmente no tiene un efecto tan evidente como la cirugía, sí que cuenta con menos dificultad para hacerlo, y evita la necesidad de una intervención quirúrgica.
De entre todas las técnicas, la que posee un efecto más acusado es la radiofrecuencia. Esta técnica consiste en administrar calor a los tejidos internos del cuerpo, con varios efectos.
A nivel de la dermis, el aumento de la temperatura en las capas profundas tiene un efecto tensado de la misma, a la vez que produce una mayor acumulación de colágeno. En la grasa subcutánea tiene efecto lipolítico, además del efecto tensor anterior.
El tratamiento con radiofrecuencia se realiza en sesiones separadas unas tres semanas entre sí. El efecto, a pesar de ser visible desde la primera sesión, se va haciendo acumulativo, para encontrar el efecto máximo en 4 a 6 sesiones.
Tras alcanzar el efecto deseado, se deben hacer sesiones de recuerdo, que dependiendo del tipo de piel pueden ser desde una cada tres meses hasta una al año.
Existen diversos aparatos productores de radiofrecuencia, algunos más efectivos que otros. La radiofrecuencia Endymed produce un tensado máximo de la piel de forma cómoda y sin alterar el estilo de vida.
Con la radiofrecuencia conseguimos tensar la piel muchas veces lo justo como para que sea innecesaria una intervención quirúrgica. En otras ocasiones, aunque una intervención pudiera proporcionar mejores resultados, se opta por la radiofrecuencia por ser un tratamiento más conservador y sin los riesgos de una intervención. Por último, también se usa como complemento a una cirugía, como por ejemplo en el postoperatorio de la liposucción, para mejorar la retracción cutánea. La radiofrecuencia tiene efectos muy buenos también a nivel de la cara, donde evita muchos liftings en casos de exceso de piel moderado.